• El entorno del Parque Nacional de Komodo

El Parque Nacional de Komodo situado dentro del Gran Triangulo del Coral y declarado por la UNESCO como reserva de la biosfera en 1986 y santuario de protección de mantas rayas y tiburones, ocupa una extensión 1.204 Km2. Su conjunto de las islas son un auténtico laboratorio de la evolución donde especies endémicas se han sabido adaptar a un entorno extraordinariamente hermoso pero a la vez hostil.

 

 

Apenas hay vida humana en sus tierras interiores; si bien es probablemente uno de los lugares del planeta con mayor vida marina ocupando el 3º lugar del planeta en biodiversidad marina, superado tan solo por Raja Ampat, Indonesia y La Gran barrera coralina en Australia. Sus aguas albergan la mayor parte de fauna marina que podemos encontrar en Indonesia. 1.000 especies de peces, unas 200 especies de corales duros y blandos así como mamíferos marinos. Las islas que componen el Parque Nacional son una filigrana de canales y estrechos entre islas con fuertes corrientes que facilitan la sobre oxigenación de sus aguas. Es el hogar ancestral de los legendarios dragones de Komodo, uno de los pocos habitantes de las islas atrapados en su propia cápsula del tiempo a los cual el paso de los años apenas ha hecho mella en su apariencia, adaptándose a los escasos recursos alimenticios que ofrece este entorno, cubriendo casi todas sus necesidades.

 

 

A pesar de su parón evolutivo han aprendido a vivir poniendo a prueba su capacidad adaptativa en este hábitat tan poco prometedor, encauzando la naturaleza adversa para provecho propio. Su presencia es el puente natural para la ciencia en el abismo que los separa de sus ancestros. En 2012 obtuvo el reconocimiento como una de las Nuevas 7 maravillas naturales del mundo siendo uno de los parques nacionales de Indonesia más visitados.